Cronica regata MARE NOSTRUM 2010





Faltan pocos días para la Mare Nostrum y ya puedo notar los nervios previos a la regata. Barcelona-vuelta a Baleares- Barcelona en solitario. Esta regata de 470 millas ya la hice en el año 2003 con el Petrouchka II acabando en segunda posición. La verdad es que fue una autentica gozada, tuvimos alguna encalmada pero en general pude disfrutar de una de las mejores singladuras que jamás haya tenido.


No deja de ser una regata costera de largo recorrido y aunque en solitario es fatigosa, dada la proximidad de la costa y las fechas, circunstancias que obligan a estar muy pendiente del tráfico, es una regata maravillosa.

Siempre quise repetirla, y este no podía ser mejor momento con la Transquadra a menos de un año vista. Como regata de preparación no la puede haber mejor, es una lástima que Toni Nicolau, mi compañero en la Transquadra, no haya podido venir pero por lo menos a mí me servirá para conocer mejor el barco. El recorrido de la Mare Nostrum será el equivalente a la mitad de la primera etapa de la Transquadra (Barcelona-Madeira).

Sin embargo algunas cosas han cambiado desde el 2003. Este año sólo he hecho una regata de 100 millas en solitario y todavía no me encuentro seguro moviéndome por la cubierta del Sun Fast 3200. Los movimientos del barco son bruscos, nada que ver con la solidez del puma 34, que apenas se movía al romper la ola sobre su costado. Además no estoy tranquilo dejando el barco al piloto en portantes con spi ya que fácilmente entra en planeo.

Con todos estos pensamientos me encamino lentamente hacia El Garraf, el club náutico que organiza la regata y que se encuentra a pocos kilómetros de Barcelona. Salgo de Porto Petro hacia la Colonia de San Pedro con viento del sur de 15 nudos que me permite poner el spi simétrico. A la altura de Cala Ratjada ya están soplando 20 nudos, sin embargo el barco se mantiene estable con la corredera entre 9 y 10 nudos. Ahora toca trasluchar y pienso que es un buen momento para probar la maniobra a pesar de alguna racha que ya está por encima de los 20. Con la mayor cazada al centro y el barco a buena velocidad inicio la maniobra sobre un planteamiento que en principio parecía correcto pero que no acaba ir bien. Estoy tardando demasiado y el barco empieza a mostrarse inestable. Aunque mantiene el rumbo, no puedo controlar el spi que en sus bruscos movimientos no me deja colocar el tangón en el anclaje del palo. Finalmente llega una fuerte racha y el barco inicia una rápida y violenta orzada hasta quedarse proa viento dejando el spi portando a la contra sobre la jarcia. Consigo arriar el spi a trozos al mismo tiempo que maldigo la hora en que se me ocurrió esta “maniobra de entreno”. Ahora tengo el spi destrozado y la perspectiva de hacer la regata sólo con el spi asimétrico.

Estoy llegando a la Colonia de San Pedro bastante desanimado y me pregunto si la rotura del spi no será un mal presagio. Estamos a cuatro días de la regata y todavía tengo que ir a Barcelona. Finalmente consigo que un amigo suba a buscar el spi y lo entregue a primera hora en la velera. Esta se ha comprometido en tener el spi reparado en una jornada y mandarlo a Barcelona donde lo estaré esperando a tan sólo unas horas de la regata.

La jornada del martes la dedico a preparar bien la maniobra al tiempo que paso el día fondeado en Formentor para hacerle al barco una buena limpieza de bajos. El miércoles por la mañana salgo hacia Barcelona con la tranquilidad de saber que ya están trabajando sobre el spi y que probablemente lo mandarán el jueves por la mañana. Debido al escaso viento voy a motor con la previsión de llegar el jueves de madrugada, un día antes de la regata.

Ya en El Garraf y una vez pasados los controles de seguridad y precintado el motor, llega el spi reparado. Este detalle ha sido importante ya que me ha dado una confianza que todavía no tenía y empiezo a pensar que las cosas pueden ir bien. Me pongo a estudiar los partes de la meteo en profundidad y a introducirlos en mi programa de navegación para ver las opciones que me da y decidir una estrategia previa para la regata que volveré a chequear con partes actualizados unas horas antes de la salida.

El parte no pinta muy bien, entra un frente por el norte que caerá sobre la flota a partir de la media noche. La previsión es de fuerza seis que puede ir aumentando cuando estemos en la costa norte de Menorca. Me voy a dormir con un nudo en el estómago ante tal perspectiva, ya que sé lo que implica un temporal del norte en Menorca. Sé que me encontraré con una mar montañosa y desapacible. La buena noticia es que irá bajando a partir de la Isla de Aire y que se mantendrá un buen viento de popa hasta Formentera. A partir de Ibiza se muestra variable y será una incógnita pero en cualquier caso no bajará de los 10 nudos, lo que promete una regata muy rápida.

Faltan tres horas para la salida y se confirma el parte. Decido que iré hacia el norte para encontrar el frente lo antes posible. En cuanto empiece a subir el viento, directo a Menorca con viento de través. La bajada a partir de Isla del Aire directa a Cabrera pero seguramente con alguna trasluchada hacia la costa del levante de la Isla, probablemente en Porto Colom. Como el viento seguirá de popa habrá que ir haciendo trasluchadas, en las que no me siento especialmente seguro. El tramo de Cabrera a Formentera lo haré por la derecha de la línea, trasluchando a mitad de recorrido. De Ibiza a Barcelona creo que beneficiará acercarse al Delta del Ebro. Todo ello si se cumplen los pronósticos, pero los partes parecen muy fiables ya que todos coinciden y las condiciones van a ser las mismas durante unos cuantos días lo que da bastante solidez a la previsión.

Salimos con viento del sur que me permite poner el asimétrico y subir un poco hacia el norte. A las pocas horas empieza a calmar y se pone una brisa suave del norte con alguna racha que me obliga a soltar la mayor. Al cabo de unos minutos vuelve a soplar del sur para volver a rolar al norte y después de nuevo al sur. Esta situación me pone un poco nervioso ya que está durando demasiado y no me parece muy normal. Finalmente se establece del norte a 8 nudos. Está anocheciendo y he perdido de vista a toda la flota. Sé que los solitarios están todos por detrás pero tendré que apretar si quiero sacarles el tiempo.

Hemos salido a las 3 del mediodía y ya casi son las 12 de la noche. El tiempo en el barco, y especialmente en regata, me pasa con una rapidez increíble. Tengo la sensación de que sólo han pasado unas pocas horas. Sé que en cualquier momento puede entrar una fuerte racha como presagio del temporal que se avecina, así que estoy muy atento. Ya no descansaré hasta dentro de muchas horas. En previsión de que el temporal sea especialmente duro voy un poco más al norte del rumbo directo, en ningún caso quiero pasar cerca de los acantilados del norte de Menorca.

El viento empieza a subir un poco y pongo el foque de tiempo duro pues estoy intranquilo. Esta intranquilidad es infundada, pues todavía voy a pasar una hora navegando corto de trapo, sin embargo prefiero que así sea pues no quiero que el temporal me pille con todo el trapo izado y así, además, tengo la sensación de estar preparado para todo. Esta sensación, cuando navegas en solitario, es muy importante porque te da tranquilidad de espíritu y seguridad. Yo diría que una de las cualidades más necesarias de un solitario es la anticipación y previsión, y también la planificación de todo lo que debe hacer.

El viento está subiendo por encima de los 20 nudos y rápidamente llega a 25, solo me queda poner dos rizos en la mayor que ya se encuentra en banda y flameando de forma estrepitosa. Es una maniobra sencilla que en mi barco se complica extraordinariamente ya que al bajarla tengo que ir sacando los patines del raíl para volverlos a meter unos centímetros más abajo al mismo tiempo que me sujeto al palo y voy soltando driza. Me faltan manos y esta maniobra en circunstancias de mucho movimiento en las que el barco está totalmente escorado es laboriosa y lenta y también de desgaste físico.

Sólo pasan unos minutos y puedo apreciar que a pesar de que no llevo demasiado trapo el barco escora mucho. Ya asoman los 30 nudos y subiendo, y se está empezando a formar una ola considerable que al entrar de través provoca violentas escoradas. Decido arriar totalmente la mayor ya que el viento sigue subiendo y la ola, lo que más me preocupa, es alta y violenta.

Arriar totalmente la mayor y aferrarla convenientemente, me ha llevado mucho tiempo. Me encuentro mojado y cansado y me pregunto cómo lo hará el Duende (el Brenta 52 de Jacinto Rodríguez) si tiene que bajar una mayor de casi 100 m2. Recuerdo que estaba amarrado junto a mi barco en el Garraf y me impresionó las dimensiones de la botavara, el apresto que parecía tener la mayor (complicada de manejar y plegar) y especialmente la altura a la que estaba el anclaje de la botavara al palo. Realmente parecían necesitar una escalera para llegar hasta allí, supongo que ya tienen un sistema estudiado.

Ahora el barco va bien, navegando sólo con el foque, con el viento de través a 7nudos. Me parece una buena velocidad dadas las circunstancias. Intento descansar todo lo posible las 60 millas que me quedaban hasta Isla de Aire. Protegido en la cabina de las olas que baten la cubierta el movimiento es tan violento que, pese a lo cansado que estoy, no puedo conciliar el sueño en toda la noche. Paso largas horas estirado en la litera sacando la cabeza cada 15 minutos.

Está amaneciendo, para mí el mejor momento en una navegación de altura, y ahora ya puedo apreciar la altura de las olas que calculo entre tres y cuatro metros. Sin embargo el amanecer me da tranquilidad y el barco se ha comportado bien toda la noche por lo que no hay motivo de preocupación. Soy consciente de que he pasado la primera noche en blanco y temo que esto me pueda pasar factura. Me ha pasado otras veces y sé que me vendré abajo físicamente si no duermo. El problema es que ahora llega lo mejor.

Estoy a la altura de Fornells y el viento ya está por debajo de los 30 nudos, aunque la ola se ha hecho todavía más alta pero con menos rompiente. Decido levantar toda la mayor ya que estoy empezando a bajar y el aparente es menor. El barco se dispara y empieza a planear, en pocas millas tendré que hacer una trasluchada. Sin Spi creo que la podré hacer sin problemas. Me paso mucho tiempo meditando la maniobra antes de hacerla ya que en mi barco no se puede trasluchar la mayor sin cazarla al centro. Dejar la mayor cazada con el piloto gobernando y el barco planeando no me deja muy tranquilo. Decido hacerla lo antes posible y acabo precipitándome, por lo que tendré que trasluchar dos veces más. Sin embargo parece que el barco ha trasluchado con facilidad.

Me aproximo a la Isla del Aire con el barco planeando a buena velocidad, pasa de 8-9 nudos a 13-14 en la planeada y esto teniendo en cuenta que todavía llevo el foque. Realmente este barco está hecho para esto.

Lo dejo con el piloto y veo que es capaz de gobernar, aprovecho la ocasión para filmar unos minutos de navegación y la velocidad máxima alcanzada (14,3 nudos) para dejar constancia. Es la velocidad más alta que he alcanzado en solitario y teniendo en cuenta que ha sido sin spi creo que está realmente bien, especialmente por la facilidad y la docilidad del barco a estas velocidades. Sólo en una ocasión he superado esta velocidad y fue A DOS probando el código cero con 30 nudos de viento. La punta fue de 18 pero ya decidimos desechar esta vela con viento fuerte por la violencia de las flameadas, que comprometían la integridad del palo. Ahora creo que con 30 nudos el spi es mucho más noble y la vela adecuada en popas con mucho viento.

Con el viento entre 20 y 25 nudos decido subir el asimétrico para mantener una velocidad de 10-11 nudos. Todavía la ola me permite algunas planeadas esporádicas pero que durarán poco. A medida que cojo el sotavento de Menorca la ola empieza a bajar aunque no bajo la velocidad media. Apunto a Porto Colom, como tenía previsto y aunque el viento me viene por la aleta la velocidad del barco me crea un aparente que permite al asimétrico rendir bien.

Traslucho en Porto Colom y directo a Formentera. Ha caído la noche y el viento está bajando. Decido subir el simétrico que ya no bajaré hasta dentro de 8 horas. Paso rozando cabrera, pues quiero ir por la derecha. El viento empieza a subir y me mantengo a la caña tres horas más. El barco va rápido, entre 10 y 12 nudos, pero necesito descansar. Si no duermo no acabaré la regata.

Suerte que a esta velocidad he llegado rápido al punto de trasluchada por lo que decido arriar el Spi y subir el Solent. El problema es que con esta vela tendré que ir un poco orzado con la velocidad por debajo de 10. Es el precio que tendré que pagar por el descanso. Calculo que pasaré al lado izquierdo de la línea a unas 20 millas de la Mola de Formentera. En ese momento tendré que trasluchar otra vez. Esta vez consigo dormir algunas horas intermitentes hasta el amanecer. Son las siete e intento dormir un poco más antes de trasluchar. Me despierto con la sensación de haber descansado, he tenido un sueño muy vivido, aparentemente me he quedado dormido y miro el reloj, son las siete y cinco. Sólo he dormido 5 minutos pero tengo la sensación de haber dormido una hora. Estoy contento porque significa que he cargado pilas.

Me cruzo con el Pinyol Vermell y el First 40.7 que van A DOS. Es una gran noticia porque significa que a pesar de haber ido con el Solent he ido rápido. Es la primera vez que veo velas desde Menorca. Traslucho al cortarles la popa y subo el Spi simétrico, hay bastante ola y el barco vuelve a planear. Me mantengo entre 10 y 11 nudos con 12-13 en la planeada. Al llegar a la Mola ya estoy al través del 40.7.

Son las 9 de la mañana y virar Formentera será todo un regalo. La mar está plana pues estamos a resguardo de la isla. Tenemos un buen viento y luce un sol espectacular. Traslucho antes que el First y esto me permite pasarle. Puedo ver el verde esmeralda de Cala Saona y me viene a la memoria los no pocos Mojitos que nos hemos tomado en el Chiringuito (sin duda los mejores entre los mejores).

Me aproximo a Es Vedrá y a pesar de que ahora el barco va muy cómodo con el spi y la mar está plana, me siento fatigado. He comido muy mal los dos días, básicamente a base de fruta y un poco de tomate con atún. He estado muy ocupado y he optado por lo cómodo y rápido, pero ha habido mucho desgaste físico por lo que necesito algo más consistente. Caliento unos espaguetis, aunque realmente no tengo mucha hambre, y el efecto es inmediato. Empiezo a encontrarme mejor. Debería tomarme más tiempo para alimentarme, pero nunca encuentro el momento.

Estoy dejando Ibiza por la popa y sigo con spi a 9-10 nudos. Tengo un mercante a mi través que no me adelanta. Veo en el AIS que va a 10 nudos, una velocidad muy baja para estos barcos. Nuestros rumbos son convergentes, pero sólo al cabo de unas cuantas horas ya que seguimos rumbos parecidos. Al cabo de dos horas sigue a mi través pero bastante más cerca, a media milla. Como llevo el spi no tengo mucho margen de maniobra y decido seguir a rumbo. No estoy muy tranquilo porque está anocheciendo y esto complicará la maniobra si hay que hacerla rápido. Ya casi por la noche baja un poco la marcha y gobierna por mi popa. Se lo agradezco.

Instalé el AIS hace algunos meses y estoy realmente contento con el resultado. Este aparato te permite tener información de otros barcos que también tengan este dispositivo. Los mercantes y barcos profesionales lo llevan todos, pero en la náutica amateur todavía es poco conocido. No sólo te da la información de rumbo y velocidad con alarma de peligro, también la información básica de la embarcación como el nombre, eslora, destino y otros datos de interés como el desplazamiento, bandera, tipo de barco, etc. Con el software instalado en mi ordenador puedo además, mandarles un mensaje, puedo pedir que me ordene la lista de barcos en función de su proximidad al mío, puedo marcar un seguimiento concreto de cualquiera de ellos. Puedo ver barcos que están a cientos de millas, lo cual es un avance con respecto al radar. Además se puede desconectar la función de emisor, función importante por temas de seguridad en ciertas partes del mundo. Es decir que tú los puedes ver pero ellos a ti no. Claro que ellos pueden hacer lo mismo…El inconveniente es que las pequeñas embarcaciones no lo suelen llevar, por lo que debería complementarse con un radar tradicional que yo he decidido no poner por temas de peso y excesivo consumo eléctrico para la capacidad de mis baterías.

Amanece y el viento rola hacia poniente subiendo de intensidad.. Arrío el spi y pongo el solent. Me ha extrañado mucho este role pues no estaba en ningún parte. El viento sigue subiendo pero mantengo el solent a pesar de que su límite es de 15 nudos de viento. Arrecia y ya está llegando a 30 nudos. Tengo que bajar el solent pues no aguantará, pero espero ya que pienso que será cuestión de minutos al no estar prevista la entrada de un frente. Pasa el tiempo y no baja por lo que a toda prisa bajo el solent. Ya he puesto dos rizos a la mayor y decido que seguiré así, sólo con la mayor. El barco va a 6´5 con el viento de través. Más tarde me enteraré de que el comité ha advertido a todos los barcos de la entrada del frente.

Estoy llegando al Garraf y puedo subir el spi otra vez. Haré las últimas millas a buena velocidad. Cruzo la línea de llegada con la sensación de haber hecho una buena regata. He tardado 2 días, 23 horas y 28 segundos en completar las casi 500 millas de recorrido. A día de hoy todavía nadie ha sabido decirme si he batido el record de velocidad de esta veterana regata. Aunque en toda la información que he podido consultar no he podido encontrar ningún barco que bajara de los 3 días. Una vez que hayan entrado todos podré comprobar que he ganado la regata.

La victoria A DOS ha sido para Pinyol Vermell, aunque el record de la regata A DOS ha sido para Bye Luby.

Seguro que tardaré tiempo en encontrarme unas condiciones tan favorables para mi barco, hasta entonces me quedo con la grata sensación de haber hecho una buena regata y de haber disfrutado como nunca de las prestaciones del barco.


                                                        Planeando a 14 nudos

Guillermo D.